Recién llegado de Sevilla donde había tentado el día anterior, David Campos se presentó a orillas del Ebro para seguir con la intensa preparación programada por su apoderado.
En la ganadería de Toros de Guerrero se abrieron los toriles por los que las bravas eralas pusieron la seriedad en las embestidas.
Templado y firme logró David hacerse con ellas para dar paso a un toreo maduro, de colocación y muñecas sueltas.
El trazo, la paciencia y la cabeza despejada dio paso también a la improvisación y torería que pronto veremos en las plazas.
Las oportunidades llegarán más pronto que tarde y estando así de bien le cogerán preparado. Uno de sus objetivos de esta temporada es presentarse en Víllaseca de la Sagra y de ser así puede dar una gran tarde de toros.
Cabe mencionar a Sergio Montero, su banderillero, extraordinario con el capote toda la tarde y hablándole durante la lidia, gran equipo tiene David tras él.
Salió a la tapia Víctor Sánchez natural de Numancia de la Sagra que causó una gran impresión.
DAVID CAMPOS SIGUE CON SU INTENSA PREPARACIÓN
Recién llegado de Sevilla donde había tentado el día anterior, David Campos se presentó a orillas del Ebro para seguir con la intensa preparación programada por su apoderado.
En la ganadería de Toros de Guerrero se abrieron los toriles por los que las bravas eralas pusieron la seriedad en las embestidas.
Templado y firme logró David hacerse con ellas para dar paso a un toreo maduro, de colocación y muñecas sueltas.
El trazo, la paciencia y la cabeza despejada dio paso también a la improvisación y torería que pronto veremos en las plazas.
Las oportunidades llegarán más pronto que tarde y estando así de bien le cogerán preparado. Uno de sus objetivos de esta temporada es presentarse en Víllaseca de la Sagra y de ser así puede dar una gran tarde de toros.
Cabe mencionar a Sergio Montero, su banderillero, extraordinario con el capote toda la tarde y hablándole durante la lidia, gran equipo tiene David tras él.
Salió a la tapia Víctor Sánchez natural de Numancia de la Sagra que causó una gran impresión.
Por: Miguel Elduque.
